BMW i8

Era el año 2008 cuando se presentó el prototipo del BMW i8 Salón del Automóvil de Fráncfort; hoy ya es una realidad y llega con importantes innovaciones de alta tecnología lo que hace acreedor el apelativo del coche deportivo del futuro.

Diseño del futuro

Sí hay algo que llama la atención en este coche es sin duda su diseño futurista. El BMW i8 tiene una estética que lo hace un deportivo que no pasa desapercibido; un frontal bajo con parrilla, faros muy estrechos y una aerodinámica que lo hacen un coche futurista. Pero sin duda las puertas son uno de sus mayores atractivos, al mejor estilo murciélago o al ochentero DeLorean que se hiciera famoso en la saga de “Volver al futuro”. Los colores juegan un papel importante en el diseño, rayas azules (eléctricas) que suman bastante a estilizar el modelo. En el interior vemos la estructura fabricada en fibra de carbono para ahorrar en el peso.

El BMW i8 tiene 4,68 metros de longitud, pesa menos de 1500 kilos, es un cupé deportivo de 2+2 plazas, 2 delanteras muy cómodas y 2 traseras más pequeñas como para niños o algún equipaje, con un maletero de 154 kilos, pequeño como para una maleta o 2 mochilas, le recordamos que se trata de un deportivo.

Motores de alta tecnología

El BMW i8 combina bastante bien las prestaciones y eficiencia. Está dotado con un motor eléctrico de 131 CV (ubicado en el eje delantero) y otro motor de gasolina 231 CV de tan solo 5 litros y 3 cilindros (que va de 4,4 segundos de 0 a 100 km/h); lo que hacen en conjunto una tracción de 4x4. Ambos motores de cambios automáticos de 6 velocidades con levas en el volante, rindiendo en conjunto 362 CV.

Este híbrido obviamente cuenta con baterías de litio (7,1 kWh de capacidad) que homologan a su motor eléctrico 37 kilómetros de autonomía eléctrica y un consumo que apenas llega a los 2,1 litros por 100 kilómetros, todo libre de contaminación. En resumen en lo que a motores se refiere el BMW i8 te permite una conducción urbana ecológica libre de toda contaminación y poder y fuerza en carretera con el motor de gasolina. Combinación perfecta en motorización de un deportivo híbrido.

Lamentablemente el BMW i8 es de edición limitada y su precio bordea los 130 mil euros, lo que lo puede alejarlo bastante del sueño que tienen algunos de conducirlo.

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